A
tenor de estas cifras sigue siendo necesario concienciar a los trabajadores y a
los empresarios para que se formen en técnicas de prevención para evitar
riesgos
El sector
primario en la provincia de Jaén tiene una importancia fundamental en su
economía. El olivar, casi un monocultivo, ocupa más de 600.000 hectáreas
y genera la mayoría del empleo de la agricultura en la provincia.
A poco más de dos semanas de que se inicie una nueva campaña de recolección
desde COAG Jaén se insiste en aplicar todas las normas de prevención y riesgos
laborales para bajar los índices de siniestralidad. Según las cifras que maneja
la organización agraria, en el sector de la agricultura y ganadería de la
provincia, se produjeron en el año 2012 un total de 1.200
víctimas de siniestralidad en el trabajo (1.884 accidentes leves y 16 graves) en la provincia de Jaén.
La progresiva
mecanización del campo, el uso de maquinarias en muchas de las tareas
habituales, así como la introducción de elementos mecánicos en el día a día de
los trabajadores agrarios obliga a un replanteamiento de cómo afrontar los
accidentes en el sector agrario.Siniestralidad
que bajaría en número con la formación en el uso y el manejo de las nuevas
herramientas a los trabajadores, así como el uso adecuado de elementos de
protección de
seguridad pasiva en los tajos.
Cifras, que
según apuntó el secretario general de COAG-Jaén, Juan Luís Ávila, «revelan que
aún hay mucho por hacer en el campo de la prevención de riesgos laborales en el
agro». Por ello, consideró que es imprescindible una correcta formación para que el
agricultor sepa lo que tiene que hacer para que pueda desarrollar su actividad
de la forma más segura posible.
Ávila entiende
que la formación es el pilar básico para la
divulgación de la cultura preventiva, ya que la
temporalidad y eventualidad de las relaciones laborales en el sector agrario,
impiden una formación directa de la empresa al trabajador. Para ello se ha
creado una tarjeta, la TPA ,
que certifica la formación reciba en materia de prevención de riesgos
laborales, tras recibir las enseñanzas pertinentes por técnicos
especializados.
El objetivo es la realización de una acción formativa completa
de 8 horas presenciales (4 horas de materias comunes y 4 horas de materias
específicas) con la que poseer un Título de Técnico de Nivel Básico específico
para explotaciones agrícolas y ganaderas de 50 horas.
Las materias
que se aprenden en este tipo de formación comprenden conceptos básicos en
prevención de riesgos laborales, derechos y obligaciones de los trabajadores y
empresarios, así como actuación en casos de emergencias e inicialización a los
primeros auxilios. También riesgos y medidas preventivas de las tareas,
así como equipos de trabajo y sus riesgos, equipos de protección colectiva
aplicables, equipos de protección individual y sus usos. Igualmente,
se ofrece información específica sobre operador de maquinaria agrícola
(tractorista), cultivos permanentes al aire libre, cultivos bajo plástico,
cultivos no permanentes al aire libre, apicultura, trabajos forestales,
ganadería intensiva y ganadería extensiva.
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